El mensaje de los proverbios

El mensaje de los proverbios


Salmo 119:105; Proverbios 1:1-7


1) INTRODUCCIÓN:


Los dichos y refranes populares tales como:




  • Dime con quién andas y… te diré quién eres.



  • Más vale pájaro en manos que… cientos volando.



  • Un grano no hace granero pero… ayuda al compañero.


Son señales en el camino, para:




  • Orientar sobre la vida.



  • Evitar el peligro



  • Encontrar el camino.



  • Contienen una sabiduría práctica.



  • Orientados a la acción


Fundamentados en la: 




  • Observación



  • Experiencia



  • Sentido Común


2) LA PALABRA Y SU SENTIDO PRÁCTICO SOBRE LA VIDA:


David decía:




  • Salmo119:105 “Lámpara es a mis pies tu palabra, y lumbrera a mi camino.”



  • Salomón, el hijo de David (1 Re 4: 29-34):


Un hombre sabio que resume la vida de una manera práctica.




  1. Escribió 3000 proverbios y 1005 poemas, disertó sobre árboles y animales.



  2. El libro de los proverbios (mashal) una recopilación sapiencial.



  3. Para actuar recta y prudentemente.



  4. No aborda grandes temas religiosos (doctrinales), más bien considera los temas sobre la vida diaria: o En lo familiar o En los social o En lo relacional o En las buenas maneras, etc.


3) APRENDIENDO A VIVIR SABIAMENTE


Proverbios 1:7 “El principio de la sabiduría es el temor de Jehová: Los insensatos desprecian la sabiduría y la enseñanza.”


Aquí se comienza a ser verdaderamente sabio, honrando (temiendo) al Señor. La sabiduría comienza por honrar al Señor (lit. por el temor del Señor)


Dos tipos de temor a Dios: o el que acerca y conduce a la adoración, pues nos muestra su gracia (ejemplo: Moisés en el Sinaí, Isaías, Ezequiel, Juan en la Isla de Patmos); o el que hace huir de su presencia pues nos muestra su justicia (Ejemplo: Adán y Eva en el Edén, la declaración de Hebreos 10:31; horrenda cosa es caer en manos de un Dios vivo)


Es decir, que la condición indispensable para alcanzar la sabiduría es: o el respeto (actitud externa) o la sumisión (actitud interna) y o la obediencia al Señor, Dios de Israel, que se revela en la historia y es fiel a su alianza y a sus promesas;


En otras palabras, la verdadera sabiduría es: o un conocimiento (saber) y un estilo de vida (vivir), o fundados en el temor del Señor y en el amor a la justicia (cf. Pr 9:10; 31:8–9; cf. 17:15, 23; 18:5).


La sabiduría es un don de Dios, desarrollado luego por la experiencia y la reflexión.


4) EL DOMINIO PROPIO, MANIFESTACIÓN DE SABIDURÍA Y MADUREZ


La palabra proverbio (mashal), lleva implícita la idea de tener dominio, de ser eficaz.


La sabiduría en este sentido esta ligado al dominio propio, del cual se nos dice: o es fruto del Espíritu (Gálatas 5:23, 2 Timoteo 1:7), o pero también es virtud que debemos cultivar (2 Pedro 1:5-6) o es el propósito de los proverbios hacernos más sabios o Son lecciones morales breves fáciles de retener en la memoria


Por eso Salomón nos recuerda de su valor:


Valor de los proverbios:


Dichos de Salomón, hijo de David, rey de Israel, que tienen como propósito: comunicar sabiduría e instrucción, ayudar a comprender palabras llenas de sentido, adquirir instrucción, prudencia, justicia, rectitud y equilibrio; hacer sagaces a los jóvenes inexpertos, y darles conocimiento y reflexión.


El que es sabio e inteligente, los escucha, y adquiere así más sabiduría y experiencia.


Salomón pidió sabiduría a Dios y el se la dio, pero Santiago hoy nos recuerda: 




  • RVA Santiago 1:5 “Y si a alguno de vosotros le falta sabiduría, pídala a Dios, quien da a todos con liberalidad y sin reprochar; y le será dada.”


Necesitamos las dos cosas: sabiduría e inteligencia; 




  • La sabiduría toca al corazón, la inteligencia la mente. 



  • La inteligencia nos hace más diestros, para comprender los propósitos del Reino de Dios, 



  • La sabiduría nos hace más obedientes y dóciles a su voluntad para entender los dichos de los sabios, y sus palabras, ejemplos y adivinanzas. 



  • La sabiduría comienza por honrar al Señor; los necios desprecian la sabiduría y la instrucción.


Santiago nos advierte de la sabiduría del mundo: 




  • 3:15 “Porque esta sabiduría no es la que viene de Dios, sino que es sabiduría de este mundo, de la mente humana y del diablo mismo.”


Que el Señor nos permita en este día, entender para obedecer.